[generacion2020] Re: Reportaje sobre nuestro colegio
- From: Valeria Andrea Reyes Carvajal <valeria.reyes.c@xxxxxxxxxxx>
- To: "generacion2020@xxxxxxxxxxxxx" <generacion2020@xxxxxxxxxxxxx>
- Date: Fri, 29 Aug 2014 14:35:47 -0400
Me parece muy interesante las opiniones que han surgido a raíz de la
publicación que nos envió Lorena. Concuerdo con mucho de lo que se ha escrito
en estos correos. Mi hija entró al Siria el año pasado, y yo de verdad tenía
una imagen absolutamente distinta a lo que es. Sin duda me he desencantado.
Trabajo también en un colegio de excelencia, donde la exigencia es tanto o
quizás más que en el Siria, sin embargo hemos tenido mejores resultados. Y la
razón de ello es muy sencillo: nos olvidamos del SIMCE y la PSU y comenzamos a
preocuparnos del real aprendizaje que pueden lograr nuestros niños. La reunión
pasada, no sé si a quienes asistieron les pasó algo similar, pero yo quedé
absolutamente deprimida con todo lo que se dijo y sólo tenía ganas de llegar a
retar a mi hija, aún cuando sé que ella se porta bien. E imagino que lo mismo
le pasa a nuestros niños. Al parecer el colegio olvidó que parte importante del
aprendizaje es el autoestima, la confianza que pueda tener cada niño en sí
mismo, y dentro del curriculum oculto que muestran, no está contemplada el
desarrollo de la misma. Pareciera que algunos profesores y directivos del
establecimiento (y digo algunos porque quiero creer que es así) se han olvidado
que la educación se centra en los niños, que quienes trabajamos en un
establecimiento estamos ahí por ellos, y para ellos, no para una prueba, no
para aumentar los números, no para aparecer con el color verde en este famoso
semáforo creado por Lavin cuando fue ministro de educación. Es triste ver que
esto no se cumple, que los niños esten en segundo, tercero y hasta en último
plano.Y esto no cambia en la otra sede!. A comienzos de este mes llegó al
colegio en que trabajo una estudiante de Pedagogia en Biología a realizar su
práctica y en una conversación señaló que la práctica anterior la realizo en el
Siria con un 3° medio, y dijo que era espantoso, que no era posible hacer
clases, que los niños a esa edad aún no tienen hábitos formados, no tienen
respeto por los docentes mucho menos lo tendrán por los practicantes, y que
administrativamente es un desorden.Es cierto que los valores se educan en el
hogar, pero también es cierto que se refuerzan en el colegio, y que si
recibimos niños sin hábitos, debemos hacernos cargo y educar esos hábitos, no
podemos quedarnos en el "papitos conversen con sus hijos en la casa" o en el
"ustedes no les enseñan en el hogar" NO!, el colegio debe tener una
autocrítica, y remediar aquello que no se está haciendo de la mejor forma. Y
aquí volvemos al principio, esos hábitos, esos valores no se educan porque
pareciera no importarles educarlos, porque es más fácil suspender la matricula,
convencer al apoderado de que lo retire, repetirle al niño que lo está haciendo
pésimo y que echa a perder el curso en lugar de corregir. A fin de cuentas, si
se va, mejora el SIMCE. Es una pena que los colegios se "echen a perder" de esa
forma.
Insisto, no creo que sean todos los profesores, no creo que sean todos los
directivos, pero esa es la imagen que nos queda.Si los niños quieren cambiarse
de colegio porque sienten que no los escuchan, que no son importantes en ese
lugar, que los profesores solo van y los retan, aún antes de que hagan algo,
que solo los felicitan cuando obtienen buenos resultados en las pruebas
comunales y cuando obtienen logros deportivos o en algún otro ámbito pasa
absolutamente desapercibido, ¿cómo no vamos a pensar nosotros lo mismo?
De verdad es lamentable lo que está pasando en ese colegio (o al menos lo que
pareciera estar pasando), y la pena es por los niños, porque ellos son quienes
viven esto todos los días.
Valeria Reyes CarvajalProfesora de MatemáticaLiceo Bicentenario de Excelencia
San PedroPuente Alto
Date: Fri, 29 Aug 2014 12:22:02 -0400
Subject: [generacion2020] Re: Reportaje sobre nuestro colegio
From: h.perez.haefele@xxxxxxxxx
To: generacion2020@xxxxxxxxxxxxx
ok...muy de acuerdo con el analisis...en varias ocaciones converse este asunto
y hace un par de semanas con el Director a raiz de que a sebastian lo dejaron
en lista de "espera".Le pedi que me mostrara como evaluaban y me pasan una hoja
con porcentajes...50% matematicas...40% lenguaje y 10% conducta..hoja de
vida..etc....me parecio un disparate (saquen ustedes sus propias conclusiones
..parece de que de nada sirve la " persona" solo si les otorga numeros)
curiosamente sebastian tiene buenas notas en ambos ramos y despues de una larga
conversacion me dice que me encuentra razon pero no pueden hacer nada porque
reciben "ordenes del alcalde"
Evidentemente sebastian ya postulo y dio examenes en otro colegio y quedo
donde la intruccion es bastante mas Equilibrada e integral el Lenka
Franulic..lo digo con conocimiento de causa ya que tengo una niña desde kinder
(ahora en quinto) y la diferencia es muy notoria.
Lamento que las cosas vayan en la direccion equivocada ya que en la se de de la
media....donde tengo otra hija en segundo medio...la cosa va peor.
El ago 29, 2014 10:32 AM, "Fernando Frias" <frias.fernando@xxxxxxxxx> escribió:
Hola
Sobre el efecto de las políticas "educativas" del Colegio, una apoderada me
comentó lo preocupada que estaba la dirección por la gran cantidad de alumnos
que este año estaban solicitando certificados para postular a otros colegios.
Además, me señaló mi hijo (6to D) que hace poco la profesora preguntó en la
sala quienes se querían ir y estaban postulando a otros colegios, -más de la
mitad del curso levantó la mano-. Por tanto, si hacemos una proyección burda y
que sea finalmente 1/4 de los alumnos que emigre (ídem a los otros 6tos)
buscando mejor formación, entonces naturalmente de los 4 sextos sólo quedarán 3
y justamente los que estarán emigrando voluntariamente por haber sido
seleccionados en otros colegios es dable inferir entonces que ellos también
hayan pasado "el examen colador" en el Siria, quedando con su cupo asegurado
para permanecer en el colegio.
¿Que va a ocurrir entonces? (ojo, es sólo especulación siguiendo razonamiento
de arriba). Los 3 7tmos del próximo año, que tiene proyectada la dirección, se
formarían con los "mejores" alumnos a los que ya se les envió la carta de
aceptación, pero de esos alumnos, muchos (1/4 por curso) migrarían
voluntariamente, generando con un 7mo que no alcanzará a completarse.
Dicho de otro modo, de los 4 actuales 6tos, uno se elimina por la prueba
"colador" interna y el otro se elimina por migración natural de sus alumnos. Si
esto se cumple será el mejor "tirón de orejas" a las políticas educativas del
Siria, formadora sólo buenas máquinillas SIMCE o PSU.
Esto haría que corran las listas de espera y finalmente el 7mo vacante se
llenaría con los que justamente el colegio buscó eliminar, lo que implica que
"la prueba colador" sería un filtrado indirecto para que se vayan, tal vez, los
mejores alumnos.
Creo además (mi opinión subjetiva) que precisamente los mejores alumnos
migrarían voluntariamente generando con esto un doble golpe al colegio ya que
inmediatamente los promedios SIMCE les bajarían el próximo año (que es
precisamente lo que tanto buscan subir o mantener) y de no haber un cambio de
actitud del colegio Siria; sólo queda suponer lo que ocurriría. La presión por
subir (mantener) los resultados será muy alta tanto para profesores y alumnos
que hará que los recursos y esfuerzos se concentren sólo en mantener estos
niveles alejando e incrementando el descontento y disconformidad de la
comunidad escolar o simplemente no hacer nada, conformarse con la baja general
y el colegio sólo será un buen recuerdo de lo que alguna vez fue (a nivel de
resultados nacionales)
Mi hijo Vicente, tiene claro que no va continuar en el Colegio (teniendo su
cupo ya asegurado para 7mo) y el discurso que se le entregó desde chico es que
el Siria es una incubadora con alto standard, pero una vez que estás listo
(6to) lo natural es irse a otro establecimiento donde se le eduque como alumno
integral, con el estudio como baluarte, pero incompleto si no están el resto de
elementos necesarios, artes, deporte, debate, participación, realidades y
diversidades (políticas, religiosas, sexuales, etc) que no tendría de
continuar en el Siria.
Debe aprender y formarse íntegramente, vivirlo y participar es la única forma
de hacerlo, los resultados Simce o PSU vienen de añadidura gracias a su actual
base, pero el resto de elementos son igualmente importantes.
Por lo mismo y como parte de su preparación para dar buenos exámenes admisión
está postulando a todos los emblemáticos como forma de ensayo (ya quedó en el
D'Halmar) y finalmente quede en el que le sea mejor, pero fuera del Siria ya
que el ciclo está cumplido.
PD. podemos hacer rápido examen de ¿cuantos de ustedes postulará a sus hijos en
otros colegio?
SaludosFernando Frías, papá de Vicente Frías.
2014-08-29 9:07 GMT-04:00 Jorge Diaz Cordero <jdiazcordero@xxxxxxxxxxxx>:
Excelente el aporte deja mucho que pensar….
Jorge A. Díaz Cordero.
De: generacion2020-bounce@xxxxxxxxxxxxx
[mailto:generacion2020-bounce@xxxxxxxxxxxxx]
En nombre de Lorena
Enviado el: Jueves, 28 de Agosto de 2014 22:02
Para: generacion2020@xxxxxxxxxxxxx
Asunto: [generacion2020] Reportaje sobre nuestro colegio
Estimados papas esto fue publicado en un portal (elquintopoder.cl), tema que
nos interesa a todos.
Lorena Gautier
Inicio del mensaje reenviado:
De: Ana MAria Saavedra <annitta56@xxxxxxxxxxx>
Fecha: 28 de agosto de 2014 17:57:56 GMT-4
Para: lorena gautier <lorena.gautier@xxxxxxxxx>
Asunto: Siria
Hace algunas semanas, los niños y niñas de enseñanza básica del colegio
República de Siria de Ñuñoa fueron sorprendidos con un anuncio publicitario en
el patio principal del colegio. Muchos llegaron a sus casas comentando sobre el
aviso que acompañaba ahora
sus recreos.
Otro comentario que cruzó agosto fue que la Dirección del establecimiento le
encargaría a una multitienda la venta de los uniformes escolares, actividad que
realizaron durante años un par de microempresarias de la comuna. Poco a poco
los niños y apoderados
hemos ido reaccionando: en cada hogar se fue instalando una simple pregunta.
¿Por qué?
Recientemente tuvimos una asamblea de apoderados con representantes de la
mayoría de los cursos y el centro de apoderados. Como era de esperar, ambos
temas estuvieron en la conversación. En resumen nos preguntamos por qué motivo
un colegio público debe estar
haciendo acuerdos comerciales con una empresa de publicidad y una multitienda.
¿Es legal este mecanismo? Y más allá de eso ¿es de sentido común en tiempos en
que se discute una reforma que ataca justamente el exceso de mercado en la
educación? ¿Qué señal se
entrega?
En la respuesta del director que conocimos por medio del Centro de Apoderados,
adujo que el cartel es parte de un convenio con una empresa de publicidad, que
se instaló también un aviso de Disney en el segundo patio y que los ingresos se
utilizarán para dar
incentivos a alumnos y profesores. Los apoderados y apoderadas reaccionamos
mayoritariamente en contra de los incentivos, y especialmente en contra de la
mercantilización de la educación, más aún en el contexto de la educación
pública. Y acordamos como asamblea,
transmitírselo al director.
No hay duda de que los profesores debieran tener mejores ingresos e incentivos
por la maravillosa labor que realizan; nos encantaría que mejoraran sus
sueldos. Nos gustaría también que nuestros niños y niñas tuvieran mayores
incentivos que mejorar una nota
Simce, que no refleja adecuadamente sus talentos, habilidades y conocimientos.
Pero no sé si estamos entendiendo lo mismo por incentivos.
La historia de los uniformes ha seguido. La reacción de los apoderados sirvió y
se nos dijo que la venta quedaría abierta, para que además de la multitienda,
siguieran participando las microempresarias. También que los niños podrían
seguir usando el uniforme
actual, en paralelo al “nuevo uniforme”, pues sólo tendría “algunas
variaciones”. Otra sorpresa.
El colador
Pero los uniformes y la publicidad no son el mayor drama para quienes formamos
parte de la comunidad escolar. El drama mayor llega cada fin de año para un
grupo de niños y niñas de sexto básico, que pierden su matrícula en el colegio.
Según se nos dice, la
capacidad en la sede de enseñanza media es menor que la de enseñanza básica.
Así que muy simple: de los cuatro sextos, sólo quedan tres séptimos. Nuestros
hijos llaman a este proceso “El Colador”.
Como apoderados no estamos seguros de si es legal que un colegio con
continuidad básica-media haga este corte. Pero, por ahora no hemos podido
evitarlo. Más allá de aquello, del fondo, hay un dejo de morbosidad y hasta
cierto espíritu macabro en la forma. Cada
fin de año se ven escenas de profundo dolor entre los niños, que reciben
angustiados, de manos de sus profesores, sobres dirigidos a sus padres. Sobres
que, por supuesto, la mayoría de las veces son abiertos en sala por muchos de
ellos, conscientes de su contenido.
En años anteriores las listas eran leídas a viva voz en las salas de clases
(“hemos mejorado los mecanismos”).
¿Qué señales damos a nuestros hijos con estas prácticas? “¿No será esto un
descreme hacia la media?”, se preguntaba un apoderado. Sin duda el proceso
asegura un mejor Simce de segundo medio, y muy probablemente una mejor PSU.
En la mencionada asamblea que se realizó recientemente, también se debatió
sobre este punto. Lo que se señala desde la Dirección es que dentro de 3 ó 4
años ya no tendremos “colador”, pues se recibirán menos niños en prekinder. Se
nos aseguró también que ni
en séptimo ni en la enseñanza media habrá niños de otros establecimientos.
Todas las familias que somos parte de la comunidad del Siria optamos por este
colegio por su condición de establecimiento público, laico, con altos
resultados. Sabemos – queremos creer – que la educación puede ser camino a una
mejor calidad de vida de nuestros
hijos. Pero quisiéramos hoy un poco más de sentido común en la gestión, afecto
y apropiación de todos los niños y niñas, no sólo de quienes tienen “mejores
notas”. Queremos destacar también al mejor compañero, al más solidario, al más
simpático, al más callado,
al más chico y al más grande. No creemos que un niño o niña deba irse por sus
notas o porque su familia no tiene dinero para renovar el uniforme. La calidad
también se da en la diversidad.
Sea quien sea el sostenedor (la municipalidad, una nueva entidad), debe
entender que tiene que consultarnos y hacernos partícipes de las decisiones
sobre la comunidad escolar. Esperamos, sinceramente, que la Reforma Educacional
logre sus objetivos y que pueda
detener hoy “el colador” de los niños y las familias de todos los colegios en
Chile.
*Columna escrita por Sebastián Lobos, Revolución Democrática Ñuñoa-Providencia,
apoderado del Colegio República de Siria.
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