Raidel:
Había leído el mismo viernes este correo electrónico, pero dejé pasar
antes de responderte.
A pesar del momento difícil que pasaste, tenés que sentirte feliz por 2
razones.
La primera de ella es que el momento duro ya pasó. Así es, la parte más
complicada es historia. :-) Lo que va a llevar unas semanas es el
momento de "adaptación" por parte de tu papá, porque tu mamá ya te
manifestó que te seguirá queriendo. A tu papá le puede llevar más tiempo
asimilarlo. Si querés acelerar el proceso, te sugiero que hablés con él
en privado, relajado, para escuchar lo que él tenga para decir, además
de sacarle las dudas que, de seguro, las tendrá.
La segunda razón por la que tenés que estar feliz es que ya no necesitás
seguir llevando esa vida paralela que venías llevando hasta ahora. A
partir de este momento, podés mostrarte al mundo tal cual sos. Nada de
andar recordando las mentiras que dijiste para poder llevar a cabo esa
doble vida. Eso ahora forma parte de un pasado pisado, y estoy seguro
que muchos de tus seres queridos ahora podrán cerrar el círculo y
entender alguna respuesta o comportamiento tuyo que, en algún momento,
les puso generar algún ruido, duda o sospecha.
¡¡Te liberaste, es lo mejor que te podía haber pasado!! :-) Y te
felicito mucho por eso.
Y, sea como sea, acordate que tenés apoyo moral auténtico de "extraños";
ya sea en esta lista de distribución o en el grupo de Telegram.
Van a venir inevitables momentos de reflexión que son necesarios para
volver a presentarte al mundo. Tomátelo con calma, no te sientas bajo
presión. Disfrutá de esas pequeñas cosas de la vida que te hacen feliz y
que otros no logran entender. Sentite libre sin vergüenzas ni culpas.
Que vos te sientas bien hará que tu entorno también se llene de energía
positiva.
Te deseo lo mejor en tu vida. Y, como siempre, seguimos en contacto.
Gracias por animarte a compartir tu historia. De verdad.