Tengan tod@s una linda tarde y mejor nochem...veremos cuando regresa el
vampichat...malisima la conexión, para al final ni poder acceder a
Internet, al menos yo y much@s hasta la madrugada no se puede...ayer jasta
las 3 casi 4 no pude...."etecsa: en deuda con el mundo"....quise decir en
línea.....
Verwmos cuando se restablece.....q extraño a Isme y su cafecito,
Iri,Mary,Deisy,Yusi,Viana....deseo estén bien, esten divirtiéndose y
disfrutando del fin....Felman,Alejandro,Pipo...salu2s a tod@s....
AMAR ES DARSE TODO
El hombre estaba tras el mostrador, mirando la calle distraídamente.
Una niñita se aproximó al negocio y apretó la naricita contra el vidrio
de la vitrina. Los ojos de color del cielo brillaban cuando vio un
determinado objeto. Entró en el negocio y pidió para ver el collar de
turquesa azul.
- Es para mi hermana. Puede hacer un paquete bien bonito? - dijo ella.
El dueño del negocio miró desconfiado a la niñita y le preguntó:
- Cuánto dinero tienes?
Sin dudar, sacó del bolsillo de su ropa un pañuelo todo atadito y fue
deshaciendo los nudos. Los colocó sobre el mostrador y dijo feliz:
-Esto alcanza?
Eran apenas algunas monedas las que exhibía orgullosa.
- Sabe?, Quiero dar este regalo a mi hermana mayor. Desde que murió
nuestra madre, ella cuida de nosotros y no tiene tiempo para ella. Es su
cumpleaños y estoy segura que quedara feliz con el collar que es del
color de sus ojos.
El hombre fue para la trastienda, coloco el collar en un estuche,
envolvió con un vistoso papel rojo e hizo un trabajado lazo con una
cinta verde.
Tome, dijo a la niña. Llévelo con cuidado.
Ella salía feliz, corriendo y saltando calle abajo. Aún no acababa el
día, cuando una linda joven entró en el negocio. Colocó sobre el
mostrador el ya conocido envoltorio deshecho e indaga:
- Este collar fue comprado aquí? Cuánto costo?
- Ah, - habló el dueño del negocio. El precio de cualquier producto de
mi tienda es siempre un asunto confidencial entre el vendedor y el
cliente.
La joven exclamó:
- Pero mi hermana tenía solamente algunas monedas. El collar es
verdadero, No? Ella no tendría dinero para pagarlo.
El hombre tomó el estuche, rehízo el envoltorio con extremo cariño,
colocó la cinta y lo devolvió a la joven y le dijo:
- Ella pagó el precio más alto que cualquier persona puede pagar: ella
dio todo lo que tenía.
El silencio llenó la pequeña tienda y dos lágrimas rodaron por la faz
emocionada de la joven en cuanto sus manos tomaban el pequeño
envoltorio.
La verdadera donación es darse por entero, sin restricciones. La
gratitud de quien ama no conoce límites para los gestos de ternura.
Agradece siempre, pero no esperes el reconocimiento de nadie. Gratitud
con amor no solo reanima a quien recibe, reconforta a quien ofrece.