Cómo parar el rastreo de Google y otros rastreadores en la Web
Publicado en Omicrono
5 de octubre de 2018
[ http://feedproxy.google.com/~r/Omicrono/~3/9WtsJ0xId_U/ ;]
La manera en la que las grandes compañías nos rastrean por la Web ha ganado
relevancia después de los últimos escándalos de privacidad; especialmente
en el caso de Facebook, uno de los servicios que más registran todo lo que
hacemos en Internet, y cómo esos datos pueden ser obtenidos por terceros.
Sin embargo, los activistas de la privacidad en Internet reclaman que
Facebook es sólo el ejemplo más famoso; y que no es el peor ni mucho menos.
Hay otros gigantes que registran todas las páginas que visitamos; con el
objetivo de crear perfiles de usuario que reflejen nuestra personalidad,
gustos e intereses. Y de todas ellas, Google es la que más destaca.
Qué es el Link Tracking y cómo nos rastrea por Internet
La mayoría de estos servicios usan el conocido como “link tracking”, o
seguimiento de enlaces; es algo bastante simple y que está presente en
prácticamente toda la Web. Y tal vez por eso, es algo en lo que no hemos
pensado mucho hasta ahora.
“Link tracking” implica crear enlaces que no van directamente al sitio que
queremos; sino que primero envían una petición a un servidor externo, que
se encarga de registrar este comportamiento. Por ejemplo, si pulso en un
enlace a la web de Omicrono, el servidor lo registra y mi perfil es
asociado con intereses relacionados con esta página; como tecnología o ciencia.
La información obtenida con el “link tracking” puede servir para muchas
cosas. Al fin y al cabo, sólo indica al propietario del servidor que un
usuario con una dirección IP ha entrado en una página web. Basándose en
eso, puede llegar a la conclusión de que ese usuario está interesado en la
temática de esa página; y crear un perfil único que va rellenando con la
información que obtiene de esa manera. Un perfil que puede rellenarse con
datos procedentes del propio servicio; por ejemplo, si tenemos la sesión
iniciada se asociará con nuestro nombre de usuario.
Ese perfil puede ser muy útil (para la compañía). Puede servir descifrar
nuestros intereses y mostrarnos anuncios recomendados, por ejemplo. O puede
servir para saber nuestras preferencias políticas y ser objetivo de
campañas. O en general, para saber más de nuestra vida y de cómo somos.
¿No te ha pasado muchas veces que te has encontrado publicidad de un
producto justo después de haberlo visto en otra web? Eso se consigue
gracias al “link tracking”.
Cómo Google rastrea usando enlaces
El negocio principal de Google está en los anuncios. Así que usa estos
perfiles para definir qué publicidad debe mostrar a cada usuario; lo
importante es mostrar anuncios en los que estemos tentados a entrar, ya sea
porque tratan de un tema que nos interesa o porque son de un producto que
estamos buscando.
Google se ha convertido en la maestra del link tracking; principalmente
porque no se basa en sólo un método para saber qué webs visitamos y cuáles
son nuestros intereses. Gracias a eso, puede mantener un perfil actualizado
y detallado de cada usuario. Así lo explican en la EFF
(https://www.eff.org/deeplinks/2018/10/privacy-badger-now-fights-more-sneaky-google-tracking),
la organización estadounidense de libertades civiles en el mundo digital.
Puede que ya te hayas dado cuenta, pero los enlaces que aparecen en los
servicios de Google no van directamente a la página web que quieres. Aunque
el comportamiento varía dependiendo del navegador que uses.
En Chrome, Google lo tiene mucho más fácil para rastrearnos gracias a que
usa “ping”, una nueva opción del estándar HTML que otros navegadores aún no
han implementado. Gracias a este “ping”, cada vez que pulsamos en un
resultado en Chrome, el navegador envía automáticamente a Google
información sobre el enlace.
En Firefox y otros navegadores que aún no han adoptado “ping”, es
diferente. Google genera un enlace, que normalmente no vemos, con la orden
al servidor para que registre lo que hemos pulsado.
Haz una prueba. Busca lo que sea en un navegador que no sea Chrome; haz
click derecho sobre cualquier resultado y en “Copiar la ruta del enlace”.
Puede que te sorprendas que no has copiado
“https://omicrono.elespanol.com/”, por ejemplo, sino algo mas parecido a
“https://www.google.com/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=1&cad=rja&uact=8&ved=2ahUKEwiytYX5zO_dAhWmgM4BHTE-D_AQFjAAegQIAhAC&url=https%3A%2F%2Fomicrono.elespanol.com%2F&usg=AOvVaw2xabqFqg2hoRfObNBY99dB”.
Google también rastrea los enlaces en servicios como Hangouts y Google
Docs, también con enlaces personalizados que no envían directamente a la
página; sino que primero envían la información a un servidor externo.
Cómo parar el rastreo de Google
Y no es sólo Google ni Facebook. Hay más servicios que nos rastrean a
diario de los que podríamos pensar. Afortunadamente, existen muchas
herramientas que nos permiten bloquear este tipo de tráfico; de Privacy
Badger (https://omicrono.elespanol.com/2016/12/privacy-badger-2-0/),
desarrollado por la EFF, ya hemos hablado en un par de ocasiones, por ejemplo.
La novedad es que la última actualización de Privacy Badger está
especializada en parar el rastreo de Google. Tanto en la búsqueda como en
Hangouts, en Gmail o en Google Docs, los enlaces dejarán de avisar a Google
de lo que estamos haciendo y visitando.
Privacy Badger es una extensión, disponible para Firefox, Chrome, Opera y
Firefox para Android. Sólo tenemos que instalarla desde la página oficial:
[ https://www.eff.org/privacybadger ;];
el resto del trabajo está hecho. Por defecto, esta extensión parará todas
las conexiones que no sean de la página que estemos visitando; no sirve
sólo para Google, sino también para otros rastreadores.
Instala Privacy Badger:
[ https://www.eff.org/privacybadger ;]