*** En la MLB pasada la 1 AM , increíblemente Aroldis Chapman que las tiraba
entre 100 y 103 millas todas , el mismo que fue heroe el otro dia por San
Francisco volvió a dar un triple largo de nuevo que incluso por poco captura
el jardinero tirandose de cabeza hacia la base de la cerca y de espaldas a
home plate pero que va no pudo y los gigantes que perdian 3-2 se fueron
arriba 4-3 y despues anotaron otra y se puso 5-3 en la baja del 8vo. Aroldis
apenas pudo sacar 1 out en ese octavo cuando vino de relevista y explotó. El
cubano jorge Soler LF de los Chicago Cubs de 3-0 y 1 BB hoy y ahora mismo en
el 9no arriba por Chicago Kris Bryan con 1 en base acaba de empatar el juego
con jonron de 2 carreras. 5-5 y Chapman se pone contento de nuevo en el
dugout pues ya el no lo pierde!. Ahora viene San Fran por el ultimo chance
en el 9no a tratar de ganarlo ahi mismo. OMG!!! Otro batazo inmenso por el
RF Albert Almora Jr que entro a cubrir cuando Chapman entro de relevo en el
8vo y que no pudo capturar la otra pero esta vez tambioene spectacularmente
se tiro de lado y en la zona de seguridad hacia la raya la capturó y sacaron
doble play en primera pues ese corredor ya iba por segunda y esto se va a
extra innings al 10mo pero yo me voy a dormir que empiezo mañana a las 7:30
AM!!!. Asi que 5-5 en el 10mo y vienen los Cubs y la maldición de la
cabra!!!! jejejejejeje ***
Indios barren a Medias Rojas y envían a David Ortiz al retiro
Cuadragular de dos carreras de Crisp 0:27
Coco Crisp extiende la ventaja de los Indios con un vuelacercas de dos rayas
Associated Press | Octubre 10, 2016
BOSTON -- Una vez que la pelota acabó en el guante de su jardinero derecho,
los Indios de Cleveland salieron a festejar en el diamante y un silencio
sepulcral se apoderó del estadio de Boston.
Luego, lentamente, el público en el Fenway Park reaccionó para corear una
última vez: "¡Pa-pi!"
Mientras los Indios festejaban el lunes la victoria 4-3 sobre los Medias
Rojas, que selló una barrida de tres juegos y el pase a la serie de
campeonato de la Liga Americana, los fanáticos de los Medias Rojas pidieron
la presencia de David Ortiz.
Diez minutos después del último out, cuando la mayoría de los jugadores de
Cleveland se había retirado para la fiesta en el camerino visitante, los
cánticos de "¡No nos vamos!" y "¡Gracias, Papi!" obligaron que el querido
toletero dominicano regresase al terreno.
Con una sudadera roja y rostro serio, Ortiz caminó al montículo y empezó a
saludar en todas direcciones con su gorra, tocándose el pecho.
Solo cuando la cámara hizo una toma de primer plano se pudo confirmar que el
gesto de Ortiz no era de disgusto ante una prematura eliminación en la
postemporada: Big Papi estaba llorando.
"Esta noche, cuando caminé hacia el montículo, me di cuenta de que se había
acabado. Era probablemente la última vez que caminaría como pelotero frente
a la multitud", dijo Ortiz. "Y las emociones salieron otra vez".
Al cabo de dos minutos, Ortiz se retiró hacia la cueva. Y era para siempre,
poniendo fin a una carrera de 20 años en la que fue actor clave en la
conquista de tres campeonatos de la Serie Mundial para Boston, transformando
a una franquicia acostumbrada a fiascos en octubre.
"Tengo alivio de que no pudo dar el hit para vencernos", declaró el manager
de los Indios Terry Francona, quien dirigió a Ortiz en Boston cuando
salieron campeones en los Clásicos de Otoño de 2004 y 2007. "Creo que un
honor estar en el terreno, compitiendo contra él en su último juego, ya que
es uno de los mejores de todos los tiempos. Te das cuenta por la manera que
la gente se quedó esperando, gritando su nombre y lo demás. Se lo merece
totalmente".
En el octavo inning, cuando Boston trataba de remontar, Ortiz recibió un
boleto. Fue su última aparición en el plato, ya que el manager John Farrell
debió sacarlo para colocar a un corredor emergente.
El bateador designado solo pudo mirar desde la cueva cuando Travis Shaw
falló con un elevado al bosque derecho para el último out y con dos
corredores en circulación.
Tyler Naquin aportó un sencillo de dos carreras y Josh Tomlin cubrió cinco
innings dominantes para Cleveland, que será local el viernes, cuando se
ponga en marcha la serie de campeonato de la Americana ante Toronto.
Se trata de la primera vez desde 2007 que Cleveland accede a la final del
circuito.
Luego de batear 38 jonrones -- la mayor cantidad de un jugador en su última
temporada --Ortiz se fue de 9-1 frente a los Indios. No conectó hits y
recibió dos boletos el lunes, con un elevado de sacrificio en el sexto
cuando había dos en base en vez del jonrón de tres carreras que la afición
anhelaba.
Cleveland tuvo marca de 4-3 este año contra los Azulejos, los ganadores del
juego de comodines y que barrieron a los Rangers de Texas para alcanzar la
serie de campeonato por segundo año seguido. Los Indios no habían ganado una
serie de playoffs desde hace nueve años, cuando superaron a los Yanquis de
Nueva York y luego cayeron ante Boston en la serie de campeonato.
Tal vez inspirados por el campeonato de la NBA que los Cavaliers de
Cleveland conquistaron en junio, el primer título obtenido por uno de los
equipos profesionales de la ciudad desde 1964, los Indios no bajaron la
guardia esta vez.
Coco Crisp sacudió un jonrón de dos carreras en el sexto episodio y Allen
sorteó aprietos en el octavo y noveno para los campeones de la división
Central. La única vez previa que Cleveland barrió en la postemporada fue
ante Boston en 1995.
Ávidos de despedir a Ortiz con otro campeonato, los Medias Rojas ganaron su
división Este, la segunda vez en cuatro temporadas que emergen del último
lugar al primero.
"Estoy contento, no sólo por mí o por cómo fue mi carrera, sino por la
organización. El paso que dimos, del último lugar a ganar la división este
año hace que incluso si las cosas no terminaron como queríamos, nos demos
cuenta de que fuimos de ser malos a ser buenos, del día a la noche", indicó
el astro.
Boston ilusionó a sus fanáticos con una racha de 11 victorias en septiembre,
pero perdió ocho de sus últimos nueve juegos, incluyendo los playoffs.
Tras esperar un día debido a la posposición por lluvia el domingo, los
Indios tomaron una ventaja 2-0 ante Clay Buchholz en el cuarto con el
sencillo del novato Naquin.
Tomlin permitió un doble remolcador de Andrew Benintendi que pegó contra el
Monstruo Verde en el quinto, un hit que le dio algo de esperanza a los
aficionados en el Fenway.
Jackie Bradley Jr. conectó un sencillo con dos outs en el noveno, y luego
Dustin Pedroia recibió un boleto en cuenta de 3-2. Shaw llevó la cuenta al
máximo antes de elevar hacia el derecho. Era el final de la temporada de los
Medias Rojas, y de la carrera de Ortiz.
Por los Indios, los dominicanos Carlos Santana de 4-0, José Ramírez de 3-1
con dos anotadas, Mike Martínez de 1-0. Los puertorriqueños Francisco Lindor
de 4-2, Roberto Pérez de 4-0.
Por los Medias Rojas, los dominicanos Ortiz de 1-0 con una impulsada, Hanley
Ramírez de 4-1 con una remolcada. El venezolano Sandy León de 4-0.
Con el retiro de David Ortiz, termina una era inolvidable en Boston
Ortiz se despide 13:03
David Ortiz habla del final de su carrera y su trayectoria en el béisbol
Por David Venn / LasMayores.com | 12:09 AM ET
BOSTON -- Con la derrota de los Medias Rojas por 4-3 ante los Indios el
lunes en el Juego 3 de su Serie Divisional de la Liga Americana, no sólo
terminó la temporada de los Patirrojos, sino toda una era con el retiro de
David Ortiz.
"Big Papi", quien cumplirá los 41 años de edad el próximo mes, había
anunciado con amplio tiempo que el 2016 sería su última campaña como jugador
activo de Grandes Ligas.
"Aun si las cosas no terminaron como nosotros queríamos, fue un paso
importante para la organización porque fue como si de la noche a la mañana
pasáramos de ser un equipo malo a ser un equipo bueno", dijo Ortiz,
refiriéndose al título divisional de los Medias Rojas este año.
Afirma Ortiz que se le han ido las emociones tres veces en las últimas tres
semanas. La primera ocasión fue cuando supo de la muerte del cubano José
Fernández, lanzador de los Marlins que falleció a los 24 años de edad el 25
de septiembre en un accidente marítimo.
La segunda vez fue el último fin de semana de la temporada regular, cuando
recibió tres homenajes de parte de los Medias Rojas previo a cada juego de
Boston en su serie contra los Azulejos en el Fenway Park.
La tercera fue el lunes a las 10:01 de la noche Hora del Este en los Estados
Unidos, cuando el público del Fenway pidió que el dominicano saliera a
saludarles una última vez con el uniforme puesto tras la eliminación de los
Patirrojos.
"En realidad, las primeras dos veces al menos sabía que iba a seguir jugando
béisbol, que faltaban más juegos", dijo Ortiz. "Pero (el lunes) cuando
caminé hasta el montículo (para saludar a la fanaticada), me di cuenta de
que era la última vez que iba a hacer eso como jugador. Ahí se me fueron las
emociones".
Aunque se fue de apenas 9-1 en los tres juegos contra Cleveland, Ortiz se
despidió con la mejor última temporada de jugador alguno en la historia de
las Mayores en cuanto a bateo se refiere. Encabezó las Grandes Ligas en
slugging con .620, en OPS (porcentaje de embasarse más slugging) con 1.021 y
fue líder de la Liga Americana en empujadas con 127, para acompañar sus 38
jonrones.
En total, el dominicano conectó 541 cuadrangulares en una carrera de 20
años, con 1,769 impulsadas. Su impacto en la ciudad de Boston ha sido
incalculable, desde sus aportes en los primeros tres títulos de los
Patirrojos (2004, 2007 y 2013) desde 1908 hasta su presencia en la comunidad
de la región de Nueva Inglaterra, además de la República Dominicana.
"Él va a tener un lugar especial en los corazones de mucha gente", dijo el
manager de los Indios, Terry Francona, quien dirigió a Ortiz durante ocho
años en Boston y fue piloto de los Medias Rojas campeones del 2004 y del
2007.
No faltaron los homenajes durante toda la temporada regular en los estadios
de los diferentes contrarios de los Medias Rojas, que incluyeron una tabla
de surf de parte de los Padres, ropa de vaquero de los Astros y los Rangers
(equipos texanos), una botella de vino de los Atléticos y hasta el mismo
teléfono que rompió Ortiz en medio de una rabia de parte de los Orioles en
Baltimore.
Los actos culminaron el 2 de octubre, último día de la campaña regular, con
una espectacular celebración en la que se anunció que un puente y una calle
cerca del estadio llevarán el nombre de David Ortiz, además del retiro
inminente del número 34 de Big Papi.
En la postemporada, los Medias Rojas no pudieron darle al dominicano lo que
más querían: Un exitoso esfuerzo en equipo para brindarle un cuarto anillo
de campeón.
En su último partido como jugador activo el lunes, Ortiz se fue de 2-0 con
una empujada por elevado de sacrificio y dos bases por bolas. Con dicha
impulsada, llegó a 61 de por vida en postemporada, empatando con Derek Jeter
en el cuarto lugar de todos los tiempos.
En total, Ortiz bateó de hit en 34 de sus 39 encuentros de playoffs/Serie
Mundial en el Fenway. Sus 59 bases por bolas en postemporada son la mayor
cantidad en la historia de los Medias Rojas.
El último momento de Ortiz en el terreno fue memorable. Recibió el segundo
de sus transferencias en el partido, de parte del derecho Cody Allen, en el
octavo episodio. Parado en la primera almohadilla, el quisqueyano animó al
público a hacer más ruido y, en el siguiente turno de los bostonianos, el
también dominicano Hanley Ramírez empujó con sencillo lo que sería la última
vuelta de los Medias Rojas para poner el juego 4-3.
Con dicho batazo Ortiz avanzó a la segunda base y acto seguido fue sacado
por un corredor emergente, su compatriota Marco Hernández.
Pese a otra amenaza en el noveno inning de parte de los Patirrojos, Allen
logró un sufrido cero para bajar el telón.
"No esperaba nada de eso", expresó Ortiz acerca de la barrida sufrida a
manos de la Tribu. "Los Indios tenían un increíble impulso y nunca
alcanzamos eso. Eso es crucial en una serie corta".
Definitivamente, coincidió la llegada de Ortiz a Boston en el 2003 con el
inicio de una época de oro de los Medias Rojas, que clasificaron para los
playoffs en ocho de las 14 campañas del dominicano vestido de Patirrojo. Por
supuesto, el momento en el terreno de más trascendencia fue en el 2004,
cuando Ortiz fue figura clave a la hora de los Medias Rojas romper la
"Maldición del Bambino" y ganar su primera Serie Mundial desde 1918. Esa
celebración ocurrió el 27 de octubre del 2004 al Boston completar una
barrida de los Cardenales en San Luis.
Ahora, después de tantos triunfos y tantos momentos inolvidables, llegó la
despedida definitiva.
"A nivel mental creo que estoy listo (para el retiro)", dijo Ortiz. "No
puedo pedirle a Dios más de lo que me dio. Estoy contento y orgulloso de
salir de esta manera".
Ni los Nacionales, ni los Dodgers tienen abridor aún para el martes
Por Manolo Hernández Douen / LasMayores.com | 12:26 AM ET
LOS ANGELES - Tal vez sea por la emergencia de que se jugarían tres partidos
seguidos en dos ciudades y sin descanso en la Serie Divisional o por el
mismo hecho de que la justa pudiera concluír el propio martes, pero lo
cierto del caso es que al cerrarse la velada del lunes ninguno de los dos
dirigentes tenía un abridor fijo para el Juego Cuatro entre los Nacionales
de Washington y los Dodgers de Los Angeles.
El dirigente de los Nacionales, Dusty Baker, se debatía entre dos abridores
bien jóvenes y el de los Dodgers, Dave Roberts, no había confirmado si se
iba con el estelar Clayton Kershaw o la esperanza mexicana convertida en
realidad Julio César Urías.
"No nos hemos decidido todavía", formuló Baker. "Mike [Maddux, instructor de
pitcheo] y yo estábamos hablando de eso. Será probablemente entre [el
dominicano] Reynaldo López y Joe Ross".
Ross, hermano menor del también abridor de Grandes Ligas Tyson Ross (Padres
de San Diego), tiene 23 años de edad y experimentó registro de 7-5 y
efectividad de 3.43 en 19 aperturas, pero apenas salió de la lista de
inhabilitados de 60 días el 18 de septiembre, luego de estar en la misma por
inflamación en el hombro derecho.
López, de San Pedro de Macorís, República Dominicana, cuenta con solamente
22 años de edad y tuvo marca de 5-3 con promedio de carreras limpias
permitidas de 4.91 en 11 juegos, seis como abridor.
Tan enredada está la situación que el propio Baker preguntó a los
periodistas ¿Quién abre por ellos?, pero luego negó que su decision sería
impactada por el plan de los Dodgers en uno u otro sentido.
"No, no estamos en un juego de deportivismo con ellos o como ustedes deseen
llamarlo", expresó Baker. "Simple y llanamente, no nos hemos decidido. No
hace ninguna diferencia [con respecto a los Dodgers]. Nos vamos a enterar de
un modo u otro, tarde o temprano". La almohada también pudiera ser la mejor
consejera de Roberts y el cuerpo de instructores de los Dodgers, sobre quién
recibirá la bola en el juego del martes en Los Angeles.
"Obviamente, la forma como usamos el cuerpo de relevo hoy [lunes] y el hecho
de que no hay descanso, tiene que ver con lo que decidamos", reveló Roberts.
"Pero no estamos preparados para anunciarlo aún.
"Es [Kershaw] una posibilidad", reveló Roberts. "Creo que se puede ver lo
que ha hecho Julio en casa y lo que ha logrado Clayton con menos tiempo de
descanso en casa. Como organización, tenemos que definir quién nos da la
mejor oportunidad de ganar".
La diferencia en el punto de vista de ambos dirigentes es que Ross y López
no figuraban tan fuertemente en la lista aparente de planes de Baker, que en
el propio comienzo de la serie apenas reveló el nombre de Max Scherzer al
preguntársele sobre una posible rotación completa para la serie, mientras el
nombre de Urías siempre fue asomado por Roberts como una fuerte alternativa
para un cuarto juego.
Curiosamente, ese tipo de cosas rara vez ocurren a lo largo de la temporada
regular, pero las circunstancias derivan en que la fanaticada de ambos
equipos se fue a la cama el lunes por la noche sin saber quién abre por su
novena favorita, literalmente horas más tarde.
¿Quién sabe? A lo mejor se deciden por un enfrentamiento entre López y
Urías, dos de las grandes promesas del pitcheo latinoamericano, para definir
el Juego Cuatro de la Serie Divisional de la Liga Nacional.
Nacionales castigan a Dodgers para ponerse arriba 2-1
Nacionales arman ataque de 4 carreras en la 3ra 0:31
Jayson Werth, Bryce Harper y Anthony Rendon guían racimo de cuatro rayas en
el tercer capítulo
Associated Press | Octubre 10, 2016
LOS ANGELES -- Jayson Werth quiso siempre que uno de sus jonrones sacara la
pelota del Dodger Stadium, donde jugó dos temporadas. En su intento más
reciente se quedó muy cerca, con un leñazo de 450 pies, que puso la pelota
en la parte alta del graderío del jardín izquierdo.
El cuadrangular de Werth ayudó a estirar una ventaja de una carrera en el
noveno inning. Anthony Rendón aportó otro vuelacerca y los Nacionales de
Washington quedaron a una victoria de ganar su primera serie de postemporada
al vencer el lunes 8-3 a los Dodgers de Los Angeles para sacar una delantera
2-1 en la ronda divisional de los playoffs de la Liga Nacional.
Werth disparó su jonrón solitario frente al cerrador Kenley Jansen en un
racimo de cuatro anotaciones en el noveno. Con ese garrotazo, empató a Babe
Ruth, al llegar a 15 en la postemporada. Ocupa el undécimo sitio en la lista
de los mejores jonroneros en playoffs.
"Desde que Dusty (Baker, el manager) me colocó como segundo en el orden,
sentí que mi tarea era embasarme para que me remolcaran los monstruos que
vienen detrás de mí", dijo Werth, cuyos tres imparables empataron su mejor
marca en la postemporada.
Cuatro relevistas se combinaron al lanzar cuatro innings y dos tercios en
blanco, poniendo a los Nacionales en posición de sentenciar la serie el
martes en el Dodger Stadium.
"Ellos trabajan rápido y no tienen miedo de enfrentar a nadie", destacó
Rendón.
Apenas 23 horas después que los Nacionales empataron la serie al llevarse el
segundo juego, Rendón disparó un jonrón de dos carreras dentro del ataque de
cuatro anotaciones en el tercero que puso fin a la actuación del abridor
Kenta Maeda.
"Esto nos da confianza", afirmó Werth. "Siento que el bullpen anda bien,
puede conservar la ventaja, y eso quizás no era algo que sintiéramos en los
años anteriores".
Campeones de la división Este por tercera vez en cinco años, los Nacionales
no pudieron avanzar en sus dos participaciones previas en la postemporada.
Sucumbieron en la serie divisional ante San Luis en 2012 y contra San
Francisco en 2014.
"Espero que éste sea nuestro año", dijo Werth. "Estamos probados para la
batalla y los playoffs, y tenemos un gran equipo. Hemos jugado juntos por
mucho tiempo, así que creo que ésta es nuestra oportunidad".
La franquicia solo ha ganado una serie de playoffs -- los Expos de Montreal
vencieron a Filadelfia en 1981, una temporada abreviada por una huelga, y
luego cayeron ante los Dodgers en la serie de campeonato de la liga. El
equipo se mudó de Montreal a Washington antes de la temporada de 2005.
Los Dodgers volvieron a estrellarse contra lanzadores zurdos, su talón de
Aquiles durante la temporada regular. Su promedio al bate de .213 contra
izquierdos fue el más pobre en las mayores.
Cuatro relevistas zurdos de Washington maniataron a los Dodgers en los
primeros dos juegos de la serie al mejor de cinco. Tampoco hicieron mucho
ante el abridor zurdo Gio González en el tercer juego. González toleró tres
carreras y cuatro hits en cuatro innings y un tercio, con cuatro ponches y
un boleto.
El único bateador de los Dodgers con buenos antecedentes previos ante
González era el receptor Carlos Ruiz, y el panameño respondió como emergente
al sacudir un jonrón de dos carreras en el quinto que les acercó 4-3.
Tras ello, los Dodgers solo pudieron conectar un par de sencillos ante el
bullpen de los Nats, que incluyó a los zurdos Sammy Solís y Oliver Pérez.
Con los Nacionales arriba 4-2, Werth desapareció un pitcheo en cuenta de 1-0
de Jansen al abrir el noveno. Ryan Zimmerman agregó un doblete de dos
carreras, un batazo que rebotó en el guante del jardinero derecho Josh
Reddick en el muro.
Jansen, líder histórico de los Dodgers en salvamentos, tuvo que ser sacado.
El manager Dave Roberts empleó a los siete relevistas de Los Angeles en el
juego.
Maeda permitió cuatro carreras y cinco hits en tres innings, con cuatro
ponches y dos boletos, en su primera salida ante Washington. El derecho
japonés, que lideró al equipo con 16 victorias en la campaña regular, es uno
de los siete novato de los Dodgers en el roster de la serie divisional.
Por los Nacionales, el venezolano José Lobatón de 3-1. El dominicano Pedro
Severino de 2-0.
Por los Dodgers, el cubano Yasiel Puig 3-0. El mexicano Adrián González de
4-1. El panameño Ruiz de 1-1, una anotada y dos remolcadas.
Los lanzadores relevistas han sido el salvavidas de los Nacionales
Por Manolo Hernández Douen / LasMayores.com | Octubre 10, 2016
LOS ANGELES, California -- Sin un buen cuerpo de relevo no se puede ganar de
una manera consistente en el Béisbol de Lujo, especialmente en la
postemporada, donde cada strike, cada out, se magnifican en importancia. Los
Nacionales de Washington han tenido uno simple y llanamente excelente y por
eso están a un paso de avanzar a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
Uno de los baluartes de ese bullpen de los campeones del Este de la Liga
Nacional ha sido el zurdo Sammy Solís, que apenas tiene dos años de
experiencia en la Gran Carpa y ha sido capaz de trabajar en blanco en sus
tres asignaciones en la misma cantidad de encuentros en la actual serie
frente a los Dodgers de Los Angeles.
"En la postemporada uno tiene que estar preparado para entrar a veces hasta
en el segundo o tercer episodio para hacer lo que sea, lanzar varios innings
o enfrentarse a un solo bateador", comentó Solís, cuya señora madre nació en
Phoenix, Arizona, de ascendencia mexicana. "Es fabuloso todo esto porque
había duda de nuestro cuerpo de relevo. Y ahora estamos aquí tratando de
terminar todo esto mañana [el martes].
Los numeritos de Solís, nacido en Minnesota y de 28 años de edad, han sido
extraordinarios en lo que va de la Serie Divisional, luego de amasar una
buena efectividad de 2.41 en 37 juegos a lo largo de la temporada.
Frente a los Dodgers en los Play-Offs, Solís ha trabajado cuatro innings en
total en los tres juegos sin permitir carrera alguna, pero por un momento
parecía que no estaría en condiciones de aportar mucho a los Nacionales por
la inflamación del hombro izquierdo que lo envió a la lista de los
inhabilitados por un mes y apenas pudo salir de la misma el 26 de
septiembre. También estuvo fuera del roster activo en julio por inflamación
de la rodilla derecha.
El mexicano Oliver Pérez tampoco ha permitido carrera limpia alguna al
integrar con su experiencia el hermetico bullpen de los Nacionales.
"Definitivamente, tuve mis dudas hace mes y medio, mi hombro me dolía
bastante, pero me alegró haberme recuperado justo a tiempo para ayudar a mi
equipo y ahora me siento de lo mejor", comentó Solís.
Por su parte, el dirigente de los Nacionales, Dusty Baker, no puede estar
más complacido por el aporte de su grupo de relevistas que ha sido de mucha
utilidad especialmente si se toma en cuenta que los abridores de los Juegos
Dos y Tres, Tanner Roark y Gio González, no pasaron del quinto inning.
"El bullpen hizo un trabajao fabuloso", elogió Baker. "Todos los muchachos
contribuyeron. Sammy obtuvo la victoria y [Shawn] Kelley maniató al grueso
de la alineación, con lo mejor que le hemos visto en lo que va en bastante
rato. Estaba bien descansado y retiró una hilera de bateadores bien
peligrosos.
"Solís se puso detrás de la cuenta un poquito, pero enviamos a Mike [el
instructor de pitcheo Maddux] para ayudarlo a sacar al público de su mente",
reveló Baker. "Todo ocurría bien de prisa. No quería que mi pitcher joven se
emocionase al notar la reacción de la concurrencia".
La ofensiva de los Nacionales produjo ocho carreras con nueve hits en la
victoria por 8-3 pero sus bateadores quisieron recalcar el tremendo trabajo
de sus relevistas al hacer un recuento de lo que va de la serie.
"Es emocionante, pero a veces puede ser un poquito monótono a veces porque
sacan a todos de out", expresó el tercera base Anthony Rendón, que tocó
madera para no ser pájaro de mal agüero al respecto. "Trabajan de prisa y no
le tienen miedo a nadie". "Nos da confianza porque nos permite siempre
seguir con una oportunidad de ganar", comentó el jardinero izquierdo Jayson
Werth. "Creo que pase lo pase, estemos arriba o abajo en la pizarra, vamos a
tener chance de ganar y es porque el cuerpo de relevo pareciera que siempre
va sacar la cara por nosotros. No pensábamos de la misma manera en años
recientes".
Francisco Liriano y Devon Travis continúan demostrando mejorías
Liriano sale del juego tras bolazo en la cabeza 1:27
Francisco Liriano abandona el Juego 2 luego de ser golpeado por una línea en
la 8va entrada
Associated Press | Octubre 10, 2016
TORONTO -- El dominicano Francisco Liriano da muestras de mejoría tras la
conmoción cerebral que sufrió la semana pasada, dijo el lunes el gerente
general de los Azulejos de Toronto, Ross Atkins, quien confió también en que
el intermedista Devon Travis se recupere de un dolor en la rodilla derecha.
Liriano sufrió la conmoción en el octavo inning del segundo juego de la
serie divisional de la Liga Americana, contra los Rangers de Texas. Fue
alcanzado en la nuca por un lineazo que salió del bate de su compatriota
dominicano Carlos Gómez.
La pelota iba aproximadamente a 102 millas por hora.
El zurdo abandonó el estadio antes del tercer juego, realizado el domingo en
Toronto, porque no se sentía bien. Sin embargo, la situación mejoró el
lunes, de acuerdo con Atkins.
"Tuvo un día maravilloso", relató. "Ingresó y pudo realizar algo de
actividad física sin mayores síntomas, lo que representa una señal muy
positiva".
Sin embargo, Liriano no es elegible sino hasta el segundo juego de la Serie
de Campeonato de la Americana contra los Indios de Cleveland, tras ser
retirado de la nómina de Toronto en la serie divisional que los Azulejos
ganaron a Texas.
Travis se perdió los dos últimos duelos de la barrida propinada a los
Rangers por un golpe en un hueso, y habría salido de la nómina si la serie
se hubiera alargado.
Atkins dijo que Travis ha podido apoyar la rodilla para fildear roletazos,
batear y correr desde que se le excluyó del segundo juego.
"Cada día y cada hora mejora", indicó Atkins el lunes. "Nos sentimos cada
vez mejor sobre la posibilidad de que participe en la Serie de Campeonato de
la Liga Americana, y por eso no lo reemplazamos. Estamos optimistas de que
se recuperará, parece que lo hará. No es definitivo que esté en condiciones
de jugar pero nos sentimos muy bien al respecto. Hoy fue su mejor día".
Azulejos lucen como un equipo temible de cara a la SCLA
Azulejos dejan tendidos a Rangers 2:32
Rougned Odor hace un mal tiro a 1ra y permite que Josh Donaldson anote la
carrera de la victoria en la 10ma.
Por Richard Justice / MLB.com | Octubre 10, 2016
TORONTO - Los Azulejos de Toronto lucen actualmente como un equipo casi
invencible. ¿Debilidades? Difícil encontrar una sola.
"Definitivamente nos sentimos bien acerca de la posición en la que nos
encontramos ahora mismo", declaró el antesalista Josh Donaldson.
Donaldson hablaba por fuera del clubhouse donde el equipo llevaba a cabo
otra celebración más, la tercera que han tenido los Azulejos en un trecho de
ocho días. Su equipo está jugando a las mil maravillas y hasta ahora todo le
ha salido bien, y ¿No es así como suelen jugar los equipos que lo ganan
todo?
Toronto completó una barrida de tres juegos contra los Rangers de Texas en
su Serie Divisional de la Liga Americana el domingo por la noche con una
victoria 7-6 en 10 innings.
Por segundo año consecutivo, los Azulejos llegan a la Serie de Campeonato de
la Liga Americana, y disputarán el Juego 1 en Boston o Cleveland el viernes
por la noche.
En estos tres encuentros ante los Rangers, el equipo canadiense exhibió
todas sus fortalezas, conectando ocho jonrones y anotando 22 carreras.
¿El bullpen? Lució hermético con una efectividad de 2.00.
¿Y la rotación? Podría ser la más profunda de todo el béisbol.
Toronto ha ganado seis juegos seguidos, una cadena que comenzó en los
últimos dos partidos de la temporada regular cuando todavía estaban peleando
por asegurar un lugar en los playoffs.
Después de conseguir dos emocionantes victorias contra los Medias Rojas en
Boston, los Azulejos ganaron el juego entre comodines de la Liga Americana
al vencer en casa a los Orioles. Paso seguido, barrieron a los Rangers en
tres duelos para avanzar a la siguiente ronda.
La historia de estos Azulejos es notable por un par de cosas. Una es que la
nómina del equipo sufrió grandes cambios. Dieciséis de los jugadores que
conformaron el roster que enfrentó a Texas llegaron en los últimos 24 meses.
El manager John Gibbons, el hombre que logró que todas esas piezas encajaran
a la perfección, dijo que su equipo cambió para mejor casi de un día para
otro. Los Azulejos tienen marca de 138-97, incluida la postemporada, desde
el 1ro de agosto del 2015. Sólo los Cachorros han ganado más juegos en ese
lapso.
Gibbons se refiere al receptor Russell Martin, quien firmó como agente libre
antes de la campaña del 2015, como "la columna vertebral de nuestro equipo".
De Donaldson, quien llegó también en el 2015 en un cambio con los Atléticos
de Oakland, dice cosas parecidas.
"Para empezar, nos hicieron un equipo más fuerte mentalmente", dijo Gibbons.
"Los dos años anteriores creo que nos faltó algo de eso. Marcaron una gran
diferencia, porque puede que tengas un montón de talento, pero si no tienes
ese carácter, peloteros ganadores, tipos que estén motivados para ganar día
a día, pues te vas a quedar corto".
Ocasionalmente, los Azulejos son criticados porque su ofensiva no carbura
sin jonrones. Pero no les importa. Se sienten cómodos con lo que son como
equipo y también con su fórmula para ganar.
"Ese es el tipo de jugadores que tenemos", dijo Gibbons.
El lado bueno de la historia es que cuando la pelota está volando sobre la
cerca, Toronto es casi invencible. Y en estos momentos está volando.
Los Azulejos han dado 11 jonrones durante su cadena de seis victorias. El
domingo le cayeron rápido al abridor de los Rangers, Colby Lewis, con dos
jonrones en el primer inning.
El dominicano Edwin Encarnación bateó un tablazo de dos carreras y dos
bateadores más tarde Martin dio un bambinazo solitario. Fue el inicio de una
amarga noche para Lewis, quien no pudo completar tres entradas y obligó a su
manager Jeff Banister a usar seis relevistas.
"Fue un trabajo colectivo", dijo Martin. "Creo que esta serie fue un reflejo
de cómo está construido nuestro equipo. Somos batalladores. Es sabroso tener
un equipo que sale al terreno y pelea. Peloteros que juegan lesionados,
golpeados, que no ponen excusas. Estoy muy orgulloso de este equipo y de la
forma en la que nos hemos comportado".
Otra clave para Toronto es que el béisbol de octubre no es algo nuevo para
ellos. El año pasado eliminaron a los mismos Rangers en cinco juegos en la
Serie Divisional y perdieron en seis encuentros la Serie de Campeonato ante
los Reales.
Antes de que empezase esta temporada la meta de los Azulejos fue llegar más
lejos. Hasta los momentos, van por el camino correcto. Los Indios o los
Medias Rojas son el único obstáculo que los separa de jugar su primera Serie
Mundial en 23 años.
"Ahora que avanzamos lo estamos disfrutando un poquito más", dijo Gibbons.
"A lo largo de esta serie sentí una sensación de tranquilidad, de confianza,
que no experimenté el año pasado. Eso es experiencia y tener la convicción
de que puedes lograr algo. Así que esperaremos y veremos qué pasa".
Zulia le pega a los Navegantes y sigue imbatible en la LVBP
Associated Press | 12:15 AM ET
El colombiano Reynaldo Rodríguez sacudió un doble productor en la parte alta
de la novena entrada para deshacer la igualdad, y las Águilas de Zulia
continuaron su tórrido inicio de campaña en la liga venezolana, al superar
el lunes 3-2 a los Navegantes del Magallanes, para hilvanar su quinta
victoria consecutiva.
Rodríguez volvió a ser la figura de Zulia a la ofensiva, al batear de 4-2
con un doble y un triple, además de dos carreras producidas, mientras que
Jason Leblebijan conectó de 3-1 con una base por bolas y anotó en las dos
ocasiones que llegó a los senderos.
Ganó el relevista Julio Vivas (2-0), quién retiró al único bateador que
enfrentó y se benefició de la reacción a la ofensiva de su equipo, mientras
que Arcenio León retiró en orden a sus rivales de la novena entrada, con dos
abanicados, para concretar su tercer rescate. La derrota fue al registro de
Hassan Peña (0-1), tras tolerar dos imparables y la carrera de la diferencia
en una entrada de labor.
En Maracay, una sólida apertura de Matt Sergey y una hermética labor de su
cuerpo de relevistas guiaron a los Tigres de Aragua a un triunfo por 1-0
sobre los Cardenales de Lara.
Sergey (1-0) lanzó cinco entradas en blanco, de apenas dos imparables.
Regaló una base por bolas y adornó su gran labor con seis abanicados,
mientras que Ronald Belisario (1) trabajó una entrada perfecta para llevarse
el salvamento.
La derrota fue al registro de John Kuchno (0-1), tras permitir cuatro
indiscutibles y la única carrera del juego en una labor de tres innings y
dos tercios.
La única carrera del juego llegó en el cuarto episodio, cuando Carlos Tocci
conectó un rodado al campocorto y venció el tiro de Ildemaro Vargas en una
cerrada jugada en la inicial, mientras que Dariel Álvarez se descolgaba de
la tercera base con la carrera de la diferencia.
Los Cardenales retaron la jugada pero la revisión no hizo sino ratificarla.
Luego de cuatro jornadas, las Águilas (5-0) han tomado el liderato de la
liga, seguidas por los Leones de Caracas (3-1), Tigres (3-2), Navegantes
(2-3), Cardenales (2-3), Tiburones de la Guaira (1-3), Bravos de Margarita
(1-3), Caribes de Anzoátegui (1-3).
El martes se miden Leones ante Tiburones, el único partido programado en la
jornada.
Jugadores honran a José Fernández durante los playoffs
Por Joe Frisaro / MLB.com | Octubre 10, 2016
MIAMI -- Los homenajes al lanzador cubano de los Marlins, José Fernández,
han continuado en la postemporada.
La noche del domingo, durante la victoria 7-6 de los Azulejos sobre lo
Rangers para barrer la Serie Divisional de la Liga Americana, el lanzador
derecho de Toronto, Aaron Sánchez, tomó el montículo con las iniciales
"JDF16" escritas en su gorra.
El domingo se cumplieron dos semanas desde que Fernández murió durante un
accidente en lancha en Miami Beach y el mundo del béisbol sigue lamentando
la pérdida de quien fuese seleccionado dos veces al Juego de Estrellas.
"La lluvia de apoyo, las cartas, las llamadas, ese sentimiento de pérdida
que tienen tantos, continua siendo algo surrealista", dijo el presidente de
los Marlins, David Samson.
Varios jugadores que están disputando la postemporada, incluidos el cerrador
de los Cachorros Aroldis Chapman y el patrullero de los Gigantes, Ángel
Pagán, han realizado tributos similares al de Sánchez al colocar el número
16 de Fernández, o sus iniciales, en gorras o camisetas.
"Este muchacho era de mi edad y tenía el mundo en sus manos", dijo Sánchez
después de la victoria de Toronto el domingo. "Era uno de los mejores
pitchers del juego, si es que no era el mejor. Ver algo como lo que le pasó,
algo tan poco visto, fue muy duro para mí".
"Tuve la oportunidad de conocerlo en el Juego de Estrellas y después de eso
compartimos algunos mensajes de textos. Obviamente es una situación con la
que no quieres lidiar nunca en la vida", siguió Sánchez. "Para mí, este
homenaje era algo que tenía que hacer, y definitivamente fue lo correcto".
Wilson Ramos vive los playoffs entre la alegría y la nostalgia
Por Manolo Hernández Douen / LasMayores.com | Octubre 10, 2016
LOS ANGELES - Usted no encontrará mucha gente tan contenta como lo está el
receptor venezolano Wilson Ramos por el éxito de los Nacionales de
Washington, pero a la vez la frustración se apodera del valioso pelotero que
va a ser operado de la rodilla derecha esta semana.
"Estoy emocionado porque sé que tenemos el equipo con el cual podemos llegar
a una Serie Mundial", comentó Ramos el domingo por la noche en Washington al
referirse a los campeones del Este de la Liga Nacional, actualmente
igualados con los Dodgers de Los Ángeles en una de las Series Divisionales
del Viejo Circuito. "No me queda de otra que apoyarlos y seguir con ellos
hasta el final".
Fuera de acción desde fines de septiembre por un desgarre del ligamento
anterior de su rodilla derecha, Ramos, participante en el Juego de Estrellas
del 2016 celebrado en San Diego, experimentó una campaña simple y llanamente
sensacional, con topes personales en juegos (131), promedio de bateo (.307),
dobles (25), jonrones (22) y carreras impulsadas (80), entre otros
renglones.
Tirios y troyanos coinciden en que los Nacionales no hubiesen hilvanado ni
remotamente una de las mejores temporadas entre todos los equipos de las
Grandes Ligas de no ser por el aporte de "El Búfalo", apodo que recibe el
cátcher de Valencia, Venezuela, tanto por su fortaleza física como por su
enorme garra y competitividad.
La fanaticada de Washington lo quiere como si fuera uno de la familia y
prueba de ello fue la tremenda ovación que le dieron al inaugurarse la Serie
Divisional en el Nationals Park. Ramos permanece con la novena, por lo menos
hasta que sea operado, para darle su apoyo moral y a la vez aconsejar a sus
colegas latinoamericanos José Lobatón (Venezuela) y Pedro Severino
(República Dominicana), que se dividen el trabajo en la receptoría en su
ausencia.
"A la vez me dio alegría, a la vez me dio nostalgia, sentí muchas
emociones", comentó Ramos. "Sentí el gran aprecio de la fanaticada de
Washington. Eso me una gran alegría, muchas más fuerzas para seguir adelante
con mi terapia, para tratar de darles a ellos la emoción de estar de nuevo
en el terreno".
Obviamente, lo que más quisiera Ramos en los actuales momentos es llamar un
juego de los Nacionales desde detrás del plato o sacudir uno de sus
descomunales y productivos batazos, pero no va a ser posible, tal vez hasta
bien entrada la próxima temporada.
"Es de verdad bastante frustrante no estar en el line-up en una
postemporada", subrayó el cátcher de la tierra de Simón Bolívar. "Me esforcé
bastante, trabajé bien duro en la temporada. No estar aquí ayudando al
equipo es bastante triste".
El siguiente paso en camino a su recuperación va a ser la respectiva
operación, que se llevará a efecto esta misma semana.
"Tenemos planes para después de que regresemos de Los Ángeles, entonces
tomaremos la decisión para operarme entre jueves y viernes", detalló el
veterano de 29 años de edad, que debutó en las Ligas Mayores con los
Mellizos de Minnesota el 2 de mayo del 2010. "Después, todo dependerá de
cómo vaya la recuperación. Lo más probable es que sea [su retorno] entre
seis a siete meses".
Aunque Ramos siempre ha demostrado ser un valiente de la pelota, desde el
minuto que debutó en la Gran Carpa y hasta en sus actuaciones en la
temporada venezolana con los Tigres de Aragua, reconoció que la dimensión de
su lesión pudiera afectar bastante su futuro inmediato en el apasionante
mundo del diamante
"Ahorita en este momento, aunque me cueste no pensar en eso, estoy tratando
de mantener mi concentración en lo que es mi rehabilitación", puntualizó el
atleta venezolano. "Me propongo tratar de salir de esto fuerte y saludable".
Informe: Bravos cerca de nombrar a Brian Snitker como su timonel
Por Mark Bowman / MLB.com | Octubre 10, 2016
ATLANTA -- Los Bravos de Atlanta están cerca de terminar la búsqueda de un
nuevo manager y una fuente de las Grandes Ligas dijo que pareciese que Brian
Snitker se quedará con el puesto que ya tuvo de forma interina en esta
temporada.
Se espera que los Bravos anuncien su decisión en los próximos días, durante
una fecha que no coincida con el calendario de la postemporada. Pero ahora
que están cerca terminar el proceso de entrevistas, pareciese que Snitker
mantiene ventaja sobre los dos candidatos ajenos al equipo: Bud Black y Ron
Washington.
Snitker tomó el cargo de forma interina cuando el cubano Fredi González fue
despedido el 17 de mayo después de un arranque de 9-28. Los Bravos tuvieron
marca de 59-65 bajo la dirección de Snitker y terminaron la temporada
ganando 20 de sus últimos 30 juegos, incluidos 12 de sus últimos 14.
José Ramírez ha sido toda una revelación para los Indios del 2016
Por David Venn / LasMayores.com | Octubre 9, 2016
BOSTON -- Con cinco pies y nueve pulgadas de estatura y unas 180 libras,
José Ramírez no es el jugador más corpulento del mundo. Y jugando con los
Indios en apenas su primera temporada completa de Grandes Ligas, tampoco es
el más famoso.
Sin embargo, el valor que ha traído el joven dominicano a la Tribu ha sido
enorme, sobre todo cuando se toma en cuenta que Michael Brantley no llegó a
jugar un solo inning por Cleveland en el 2016 debido a una lesión en el
hombro derecho.
"Hizo que la ausencia de Brantley fuera menos dolorosa", dijo acerca de
Ramírez el manager de los Indios, Terry Francona. "Era nuestro tercer bate,
candidato a JMV. Es una baja dura y nos dijimos, '¿Cómo vamos a anotar sin
este muchacho?' Pero José, en cierto sentido, absorbió los turnos de él. No
son turnos exactamente idénticos, pero hizo un gran trabajo",
Efectivamente, Ramírez jugó mucho en el jardín izquierdo en la primera mitad
de la campaña regular, esencialmente sustituyendo a Brantley. Pero cuando
los Indios decidieron cortar vínculos con el compatriota de Ramírez, Juan
Uribe, el oriundo de Baní se hizo cargo de la tercera base y ha rendido
tanto con el guante como al bate.
"José no sólo ayudó ante la ausencia de Michael, sino también nos hizo saber
que tenemos otro jugador de todos los días, uno muy bueno", expresó
Francona. "Aspiras a eso cuando alguien recibe una oportunidad y creo que él
lo llevó a un extremo. Es un jugador muy bueno".
Los números ofensivos de la campaña regular son impresionantes. En 152
juegos y 618 visitas al plato, el bateador ambidextro de 24 años tuvo
promedio de .312, OPS (porcentaje de embasarse más slugging) de .825, 46
dobles (segundo en la Liga Americana), 11 jonrones, 76 empujadas, 84
anotadas y 22 bases robadas.
Aparte de dichas cifras, Ramírez ha demostrado un bateo sumamente oportuno.
Registró .346 con corredores en circulación (4to mejor en la Americana) y
.355 con corredores en posición de anotar (empatado en el 5to lugar del
Joven Circuito), además de .366 en corredores en posición de anotar y dos
outs.
En lo que va de la postemporada, Ramírez ha seguido el ritmo, bateando de
7-4 (.571) en los primeros dos choques de la Serie Divisonal de los Indios
contra los Medias Rojas, con un doble y dos anotadas.
"Gracias a Dios (los batazos) están saliendo con éxito", dijo Ramírez acerca
de su bateo oportuno. "En los momentos importantes he puesto la bola en
juego y esos batazos han salido de hit".
Ramírez se ve mucho más cómodo hablando de las hazañas colectivas de la
Tribu que de sus propios logros individuales, sobre todo con Cleveland a ley
de una victoria de eliminar a Boston y avanzar a la Serie de Campeonato de
la Liga Americana.
"Nosotros somos un equipo que estamos unidos y estamos todo el mundo
ayudándonos en lo que podamos", dijo Ramírez acerca de los Indios del 2016.
"De eso se trata, siempre jugar una buena pelota en conjunto".
Y para Francona, una pieza crucial de esa dinámica colectiva ha sido
Ramírez, versátil a la defensa y bien activo con el madero.
"Nos ha brindado un impulso tan grande como cualquier otro en el equipo",
dijo el capataz